Hola amigos, después de varios días de trabajo, hoy me he animado a escribir sobre un colegio que tiene más de 30 años en chía, cerca a Bogotá.
Tengo la oportunidad de conocer varios colegios con distintas metodologías tanto a nivel nacional como internacional. Pero este, tiene algo que lo hace distinto al resto dada su historia.
En primer instancia el ambiente escolar. & segundo la apuesta por la innovación.
Es interesante como el proceso de formación nace en cualquier espacio fuera de las paredes y el tablero. Las zonas campestres en conexión con la naturaleza, buenos profesores y las ganas de los estudiantes de ser mejores cada día, hacen del colegio un lugar que posibilita la diversidad, la experiencia y la juventud, con rumbo a formar a más y más personas.
"Educar en la naturaleza es la vía para proteger nuestro planeta y a nosotros mismos" Katia Hueso.
La apuesta por la innovación educativa puede ser riesgoso desde la prueba y el error, pero si una institución acierta con los profesionales y metodología indicada es como sacarse la lotería.
Al tratarse de un lugar privado, extenso, tipo americano y con pequeños grupos de estudiantes, se trabaja una enseñanza más enfocada y personalizada, donde quien rota es el estudiante y no lo profesores. Algo inusual en instituciones publicas y tradicionales.
Ojala que la visión del colegio sea para bien y su comunidad.
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